¿Qué hay? hoy quiero compartir con vosotros una recta de Sabores de Siempre, esta en particular, me recuerda mucho mucho a mi casa, a mi padre y a mi tierra.
Porque, en Murcia cuando llueve se comen migas y, en Cieza, se come gachamiga dura o blanda. (sí, sé que mucho llover últimamente, cómo que no, pero me apetecía mucho hacer esta receta) Bueno, para los que no seáis de aquí, esto de la gachamiga no es otra cosa que lo que todos conocéis por migas (hechas con harina), y, aquí llamamos migas a las que se hacen con pan, por lo menos en mi casa, de toda la vida ha sido así.
Es la primera vez que las hago, tele-dirigida por mi padre, todo hay que decirlo, pero con mis manitas.
Ingredientes:
- 1 Litro de agua.
- 1 kilo. de harina.
- Salchicha (salchicha blanca).
- Longaniza (salchicha roja).
- Tocino.
- Ñoras.
- Aceite.
- Sal.
Elaboración:
Vamos a empezar con el embutido, que lo freiremos en una sartén y al que le añadiremos las ñoras. Reservamos y apartamos en un recipiente el aceite que ha resultado de freír todo eso. (que luego vamos a utilizar para hacer las migas).
Ahora es muy importante elegir bien la sartén que vamos a utilizar para formar la gachamiga, tiene que ser grande y honda, a lo wok rústico. Vamos a verter el agua y ponerla a hervir.
Cuando el agua este en ebullición, el siguiente paso es añadir la harina, sal y el aceite que teníamos revesado de freír el embutido. Y, con una rasera especial para migas, marcamos una cruz en la harina. Este paso es esencial para que se forme la gachamiga, o por lo menos eso me decía mi padre mientras me monitoreaba, y si lo dice mi padre, hombre de campo, va a misa.
Bien, ahora hay que ir cortando, removiendo, cortando, removiendo, hasta que se formen las bolas, que primero serán mas gorditas, y cada vez se irán deshaciendo en migas más pequeñas. Es un proceso lento y pesado, hay que armarse de paciencia y hacer entreno de brazos antes, o incluso ¡tener quien te releve!
Cuando ya tengamos las migas formadas añadimos el embutido y las ñoras, hay quien le pone también sardinas.
Aunque parezca que hay que hacer un cursillo de formación antes de atreverse con la gachamiga, en realidad es una receta muy sencilla que, como todo, cuando se le coge el truqillo sale volada. Así que ¡a practicar!
Nos leemos pronto en la siguiente receta de Sabores de Siempre. ¡Feliz viernes!
Me encantan todas tus recetas, son espectaculares! ¿Has pensado en darte a conocer en alguna red social especializada? Hay una app que se llama Foodies Moveando y seguro que tendrías mucho éxito. Yo te voto! :)
ResponderEliminar